Grindavík es un municipio pesquero situado en la península de Reykjanes, en la costa oeste de Islandia. Es una de las pocas ciudades que cuenta con un puerto en su costa, y a 4 kilómetros se encuentra su mayor atracción turística, la Laguna Azul. Muchos de sus más de 3.000 habitantes se dedican a trabajar en la industria pesquera.